Manuel Escudero:
El pasado 25 de enero asistí como observador a la clase de biología que Antonio imparte en 1º de la ESO.
El tema que estaban tratando es el de las distintas familias de plantas.
Al ser un tema preminentemente práctico al tener su reflejo directo en la naturaleza, Antonio se ayudaba de una presentación de power point repleta de ejemplos visuales, que completaba con pequeñas explicaciones que pudieran despertar el interés de los chicos, como cuestiones geográficas, históricas o meras curiosidades que probablemente ayuden a fijar más fácilmente los conocimientos.
La clase estaba claramente enfocada en el vocabulario, desde los nombres científicos en latín hasta los nombres en inglés, pasando por las denominaciones en castellano; de tal manera que la clase trascendía las ciencias naturales y el inglés para aportar cuestiones más transversales pertenecientes a la cultura general.
Creo que la mejor muestra del éxito de la clase es que de camino a casa (la clase era a última hora), yo, que poseo una curiosidad natural bastante más escasa que la de un chico de 12 años, me iba fijando en todos los árboles intentando aplicar los criterios que Antonio había explicado, a ver si era capaz de identificarlos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario