De Diego García:
Ayer tuve el placer de observar a mi jefa de departamento en una de las clases mas surrealistas de mi corta experiencia docente. He de admitir que al final acabé llorando de la risa.
Tras la limpieza inicial, la clase empezó con un Quizizz para repasar los verbos irregulares. Estos chicos no tienen muy buen nivel de inglés ni tampoco motivación, por lo que los exámenes normales no les despiertan mucho entusiasmo; sin embargo, al hacer el test con el móvil y ver los resultados en directo la cosa cambia notablemente y entre ellos se pican bastante por obtener la mejor nota.
Tras esta actividad, la clase siguió leyendo el libro de lectura. Entre que la lectura no es su actividad favorita ni tampoco se les da bien, aparecieron las interrupciones, comentarios jocosas y otro tipo de distracciones que se nos puedan venir a la mente. Sin embargo, la profe consiguió controlar la situación perfectamente (con una dosis extrema de paciencia) y proseguir con la actividad, solventando dudas y corrigiendo los errores de una manera muy participativa (cosa que también hacían los propios compañeros).
No hay comentarios:
Publicar un comentario